miércoles, 14 de abril de 2010

PROYECTO INSTITUCIONAL 2010

COMPROMISO 14:
“¡Luz, cámara… Acción!”
La contaminación con deshechos tóxicos, la falta de agua, el exterminio de animales y plantas y el descuido de los recursos naturales están destruyendo nuestro ambiente y el futuro de nuestros niños. Por este motivo, nuestro proyecto apunta a la concientización y puesta en práctica de valores que fomenten una conciencia ecológica, una conciencia de cuidado, no solo del medio que nos rodea sino también del propio cuerpo e incorporación de hábitos saludables personales y comunitarios.
Nuestro desafío es poder reconstruir valores a través de la comunicación fomentando el respeto y la integración intercultural.
Es responsabilidad de todos preservar los recursos naturales para las generaciones futuras. Es por ello que esta institución se ha propuesto generar en toda la comunidad educativa, barrial y en la Ciudad de Buenos Aires un compromiso con el lugar donde vivimos.
El presente proyecto está transversalmente atravesado por las implicancias del año 2010, en el orden internacional “Año mundialista” y en nacional “Año del Bicentenario”. Los hechos históricos de tal magnitud no pueden ser abordados de forma aislada, descontextualizados, por lo que no se puede ignorar el sistemas de relaciones en el que se hallan inmersos y su interrelación con las distintas áreas.
A partir de este proyecto queremos que los niños puedan sentirse responsables activos y a través de acciones concretas puedan prevenir y revertir desde lo micro hasta lo macro las temáticas que nos preocupan, también trabajar las distintas áreas del conocimiento , la expresión en sus diversas formas ( oral, escrita, artística y corporal) como acceder a la cultura para ampliar la comprensión del entorno en el que crece el niño, el fortalecimiento de las relaciones grupales y personales contribuyendo a formar futuros ciudadanos, más críticos, tolerantes, respetuosos y solidarios en su accionar cotidiano.

FUNDAMENTACIÓN:

La implementación de proyectos en los que los chicos participen activamente constituye un momento fundamental de esta propuesta y, seguramente, contribuirá a estrechar los vínculos entre la escuela y la comunidad.
La escuela tiene como función “Distribuir saberes que es una forma de distribuir poder”. Los alumnos tienen derecho a que la misma provea herramientas que le permitan adquirir poder sobre el lenguaje, sobre los conocimientos, sobre el tratamiento de la información, sobre las expresiones artísticas, sobre el propio cuerpo o sea saberes que les permitan desarrollar las practicas sociales con autonomía, interactuando de manera inteligente y crítica con masas de información cada vez mas abundantes y con tecnologías en permanente transformación en situaciones sociales reales.
Después de dos años de trabajar en las líneas del proyecto planteado (Compromiso 14: Ecología en acción) los grupos de alumnos adquirieron algunos hábitos, conocimientos, actitudes que desarrollaron su conciencia ecológica, este año como cierre del proyecto trienal es tiempo que puedan transmitir mediante las distintas formas de expresión los alcances de sus conocimientos. La escuela deberá fomentar un ejercicio permanente de análisis de las propias experiencias culturales mediante las cuales los estudiantes se integren a la sociedad progresivamente adecuándose a su edad como sujetos de derecho, como consumidores, como agentes de salud, como interlocutores de la comunicación y como miembros del ambiente social y natural. Sólo esta mirada analítica del aquí y el ahora de la ciudadanía constituirá una preparación efectiva para los escenarios futuros en la medida en que todos los saberes enseñados en la escuela estén al servicio de la formación crítica y creadora de los estudiantes.